Lucas viaja a visitar a su hermana, a un pueblo remoto al sur de Chile. Frente al océano y la niebla, conoce a Antonio, contramaestre de un barco de pesca local. Cuando un intenso romance surge entre ambos, su fuerza, su independencia y su adultez se vuelven inamovibles ante la marea.
Samuel González
Antonio Altamirano
Marcela Salinas
Rafael Contreras
Dirección: Omar Zúñiga Hidalgo
Guion: Omar Zúñiga Hidalgo
Casa productora: Cinestación, Terranova
Producción ejecutiva: Dominga Sotomayor, Josemaria Naranjo
Producción: José Luis Rivas, Omar Zúñiga Hidalgo
Productores asociados: Martín Bravo, Nicolás Ibieta, Sokio
Dirección de fotografía: Nicolás Ibieta
Montaje: Catalina Marín, Omar Zúñiga Hidalgo
Dirección de arte: Nicolás Oyarce
Marcelo Barrionuevo-Chebel
Como dice el último verso de la canción que suena al final: disfrutan la vida y luego se van. ¿Madurez de una decisión? ¿Un pasado que empuja a buscar la libertad por afuera y más allá del territorio conocido? ¿Un presente intempestivo? Entre Lucas y Antonio se teje una trama intensa como el amor, como toda trama de amor, y salvo una piedra sin mucha fuerza que alcanza a Lucas después de un encuentro con Antonio, no hay miradas que condenen la historia. En todo caso, es el mensaje esperanzador de la película, me parece a mí, aunque hasta la última imagen de un Antonio que conduce y vuelve la mirada hacia su lado derecho, mantiene el deseo de que uno u otro se decida por renunciar a su destino particular y se sumerja en uno de a dos. Todas las gamas de azul, (en una Región de los Rïos de belleza única, hablan de un espíritu fresco e infinito, lejano por completo de la opresión de no hace tanto que traían los colores de las que llamábamos "otras historias de amor".